¿Este es el momento para solicitar crédito de vivienda?
La difícil situación económica que hoy vivimos no solo en Colombia, sino en
muchos países del mundo debido a la suba permanente de los intereses a los
créditos y a la inflación, entendida como el aumento desmedido de los precios de
los bienes y servicios, haciendo que el dinero pierda cada vez más su valor
adquisitivo, es una voz de alerta que nos lleva a pensar que no es un buen
momento para hacer crédito de vivienda.
La inflación y las altas tasas de interés están afectando de manera significativa al
sector de la construcción, ya que los créditos que hace 2 años estaban a 0.8% hoy
oscilan entre 1.9 y 2%, lo cual tiene su impacto directo en el costo de la vivienda y
en la rentabilidad de quienes se dedican a este sector de la economía; es así
como algunas empresas constructoras vienen postergando el comienzo de sus
proyectos.
De igual manera, el interés de los créditos de vivienda ha aumentado, ubicándose
entre el 1.5 y 1.6%, situación que no se veía hace más de 10 o 15 años y, si a eso
se le suma el menor poder adquisitivo de las familias a causa de la inflación y los
costos adicionales para poner habitable un apartamento de interés social (VIS)
entregado en obra gris, el pago de la deuda va a ser mucho más elevado.
Ahora bien, la idea no es descartar el sueño de tener vivienda propia, sino todo lo
contrario. La invitación es a cambiar de estrategia para acceder a ella
garantizando la inversión, la tranquilidad personal y la estabilidad económica de la
familia. De ahí que en tiempos difíciles como estos lo más recomendable sea
evitar los créditos y optar por el ahorro de vivienda, de tal manera que en el corto o
mediano plazo se tenga una cuota inicial mayor y así, el préstamo sea solo el 60 o
70% del valor del inmueble, lo cual indudablemente será más fácil de pagar y con
un porcentaje menor de intereses.
muchos países del mundo debido a la suba permanente de los intereses a los
créditos y a la inflación, entendida como el aumento desmedido de los precios de
los bienes y servicios, haciendo que el dinero pierda cada vez más su valor
adquisitivo, es una voz de alerta que nos lleva a pensar que no es un buen
momento para hacer crédito de vivienda.
La inflación y las altas tasas de interés están afectando de manera significativa al
sector de la construcción, ya que los créditos que hace 2 años estaban a 0.8% hoy
oscilan entre 1.9 y 2%, lo cual tiene su impacto directo en el costo de la vivienda y
en la rentabilidad de quienes se dedican a este sector de la economía; es así
como algunas empresas constructoras vienen postergando el comienzo de sus
proyectos.
De igual manera, el interés de los créditos de vivienda ha aumentado, ubicándose
entre el 1.5 y 1.6%, situación que no se veía hace más de 10 o 15 años y, si a eso
se le suma el menor poder adquisitivo de las familias a causa de la inflación y los
costos adicionales para poner habitable un apartamento de interés social (VIS)
entregado en obra gris, el pago de la deuda va a ser mucho más elevado.
Ahora bien, la idea no es descartar el sueño de tener vivienda propia, sino todo lo
contrario. La invitación es a cambiar de estrategia para acceder a ella
garantizando la inversión, la tranquilidad personal y la estabilidad económica de la
familia. De ahí que en tiempos difíciles como estos lo más recomendable sea
evitar los créditos y optar por el ahorro de vivienda, de tal manera que en el corto o
mediano plazo se tenga una cuota inicial mayor y así, el préstamo sea solo el 60 o
70% del valor del inmueble, lo cual indudablemente será más fácil de pagar y con
un porcentaje menor de intereses.